domingo, 27 de abril de 2008

competencias y sincronías

Vamos caminando para su trabajo. Él me cuenta que cada vez que pasa por ahí se cruza con un hombre que lava los pisos. Y que cada vez se saludan con más simpatía.

Yo, que no soporto que me hagan un cuento si no tengo uno mejor para desempatar, le digo que, cuando salgo para mi trabajo, saludo a una legión de vendedores, oficinistas y limpiadores de la Intendencia, que justo comienzan sus tareas. Y que cuando vuelvo a casa los encuentro precisamente en la tarea inversa: desmontar mesas, buscar el ómnibus de regreso, barrer la mugre que se juntó en el día.

Me parece insuficiente y agrego: “A veces, entre tanta sincronía y tanta duda existencial, me pregunto....“¿Yo no seré el Sol en realidad?”

Él se ríe. Y responde el “Buen día” del hombre que limpia el piso.

2 comentarios:

Unknown dijo...

amiga!
lunes gris! lluvia, humedad y humo... no me dio para salir de la cama, cable largo del tel para adinet y compu... laburando y... regalándome lecturillas de la web... me encanta leerte, de verdad si supieras lo que lo disfruto... editarías un libro sólo para que yo lo lea. Comparto el sentimiento por el kiwi! beso, tqm

kariaco dijo...

Sé de tus múltiples resposabilidades pero esto de abandonarnos por casi un mes no da, así que media pila amiga que te extraño.
Besos