Considero fundamental tener una imagen linda que sustituya el último pensamiento del día. Siempre trato de tener al menos una que valga la pena evocar en ese momento, o cuando me toca ir al dentista, por ejemplo.
Mi dentista de la infancia tenía un método que yo he ido reiterando con sus colegas sucesores. Agarraba el torno y me decía:
- “Bueno. Ahora cerrá los ojos y pensá en algo bieeeen lindo. Muy lindo”.
Y ahí uno no sentía ni aguja ni torno ni nada.
Pero hay épocas en que tengo escasez de imágenes. Entonces trato de enamorarme o postergar mis limpiezas de sarro.
Hay consultas muy frustrantes. A veces el profesional no comprende y lo empieza a mirar mal mientras uno (ya con la manguerita chupadora puesta) busca desesperado en su banco de imágenes, mientras mantiene las manos haciendo la seña de la “T”.
Cuando lleva más de 50 segundos encontrar una imagen que anestesie, seguramente el felizómetro está en números rojos. (Yo tengo más de una carie arreglada en esas condiciones y doy fe de que uno sufre hasta el olor de la pasta).
Esta semana voy a sacarme placas (otra experiencia que amerita sendos retiros de mi banco de imágenes) y además tengo dentista. Por suerte pude hacer un depósito grande y por adelantado.
4 comentarios:
Creo que voy a empezar a crear mi banco, ¿será una cura, o al menos paliativo para mis males?
La verdad es que ayuda. Aunque claro... lo mejor es poder abrir una cuenta en "Imágenes" y otra en "Mimos".
Los "Mimos" son mucho más caros y tienen intereses mayores. A mí me la cerraron por falta de fondos, pero ando buscando la manera de abrirla de nuevo ;)
Y tener un cofre fort de Mimos debe ser lo máximo...
Con la cuenta en Imágenes la vas llevando y el precio no es tan alto.
Uf, me lo temía, lo de los mimos... aunque con esto de que ahora todo funciona con las Nuevas Tecnologías yo creo que también valen los mimos virtuales. Quiero creer que sí.
Aún así, ya he abierto mi cuenta de imágenes.
Gracias por la aclaración.
"Un depósito grande por adelantado".......ta....... muy bien.
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