lunes, 18 de febrero de 2008

efecto "buena chica"

”Buena chica” me dejó un comentario muy lindo en este blog. Yo lo leí en la oficina (atención niños: no está bien leer blogs en el trabajo) y me puse contenta. Lo compartí con mi jefe y en ese mismo momento, él se decidió a crear su blog (tampoco deben hacer esto en horario de trabajo). Para mí se sumó entonces la alegría de poder enseñarle algo en la compu; acaso por primera vez. Como mi jefe no sabía qué escribir, puso una dedicatoria a su esposa e hija. Les dijo que ocupaban todo el tiempo de su cabeza, o algo así. Entonces la alegría llegó a su esposa. Y dentro de seis años, cuando aprenda a leer, su hija se va a poner contenta al ver lo que su padre escribió cuando ella estaba recién nacida… Y todo eso por unos renglones de “Buena chica”, que vienen a recordarnos cómo podemos generar cuatro alegrías de un plumazo, o en este caso, de un “postazo”.

1 comentario:

Fernando dijo...

Hola! Paso seguido por aquí (perdona, digo acá. je)...entonces ya son cinco...¡Adelante!

Había leído en letras muy pequeñas...